¿Quién no ha oído hablar del Kilimanjaro? También conocida como El techo de África, esta impresionante montaña africana es la más alta del continente, así que seguro que sabes de lo que hablamos.
En realidad, este monte es un volcán dormido de triple cumbre, y es una de sus cumbres la que constituye el pico más alto del que hablamos. Además, esta montaña ostenta el título de pico aislado más alto del mundo, es decir, que no está enmarcado dentro de ninguna cordillera.
¿Quieres saber más? En este artículo te vamos a contar todo lo que sabemos (o un poco menos, para que aún te queden ganas de descubrirlo por ti mismo) de este fantástico lugar que encontrarás en las entrañas de África. Además, si te estás preguntando si es posible hacer un viaje de aventura por el Kilimanjaro sin tener demasiada experiencia, ¡la respuesta es sí! ¡Sigue leyendo y descúbrelo!
Dónde está el Kilimanjaro
El Kilimanjaro se encuentra en Tanzania, a unos pocos kilómetros de la frontera con Kenia. Esta cercanía, y el quiebro que hace la frontera entre los dos países al llegar a esta montaña, se debe al reparto de territorio entre Gran Bretaña y Alemania, quedando el monte del lado alemán dentro de Tanzania. Sin embargo, las mejores vistas se las quedaron los británicos, puesto que en la reserva de Amboseli es donde mejor se puede ver el monte.
Los nombres de los tres volcanes inactivos que conforman esta montaña son Shira, Mawenzi y Kibo, siendo este último el pico más alto.
En cuanto a la situación geográfica del Kilimanjaro, cabe destacar que se encuentra a unos 300 km al sur de la línea del ecuador, y a unos pocos kilómetros de la frontera con Kenia.
Características
En cuanto al nombre Kilimanjaro, se desconoce realmente su origen, aunque sí se sabe el nombre que ha recibido por parte de los pueblos que lo rodean: montaña de la grandeza, en swahili, lo que derrota a la caravana, en chagga, o montaña blanca, en masái. Cualquiera de estos nombres hace referencia a las características visibles del Kilimanjaro, que te contamos a continuación:
El monte Kilimanjaro tiene una altura total de 5.895 metros, a los que llega el pico Uhuru, en el cráter Kibo. Los otros volcanes llegan a los 5.149 metros (Mawenzi) y 3.692 metros (Shira).
Debido a su situación geográfica (su altura combinada con la cercanía al mar), las inmediaciones del Kilimanjaro cuentan con diversos ecosistemas, muy diferentes entre sí, dentro del mismo entorno. Estos ecosistemas son glaciares, desiertos, páramos alpinos, sabana y selva tropical. Por eso, viajar al Kilimanjaro es una experiencia similar a viajar por multitud de sitios que contienen todos estos ecosistemas.
Los glaciares, en la cumbre, son un signo de alerta del cambio climático. Hay estudios científicos que estiman que estos glaciares habrán desaparecido antes de 2025.
Los animales que habitan este paraje, y que es probable que te encuentres si decides hacer un safari en el Kilimanjaro, son varias especies de primates, leopardos o antílopes, además de gran cantidad de aves que anidan alrededor del techo de África.
Trekking
Cada vez son más los que se aventuran a vivir la experiencia de trekking en el Kilimanjaro. Aunque la ascensión a la cima es complicada, existen gran variedad de rutas que permiten que cualquiera con ganas y algo de experiencia en trekking pueda emprender este viaje de escalada sin demasiadas dificultades. Para ello, es imprescindible saber cuál es la mejor ruta para subir al Kilimanjaro.
Además, es imprescindible llevar ropa y calzado cómodo, que te permitan mantener una buena temperatura.
Viajes organizados con guías
Debes saber que las excursiones por el monte Kilimanjaro están controladas por el gobierno tanzano, y siempre deben hacerse en compañía de un guía que conozca la zona. Por eso, si estás pensando en hacer una excursión al Kilimanjaro, te recomendamos que contactes previamente con guías locales, de forma que te asegures de la legalidad del viaje.
Curiosidades o sucesos
El leopardo del Kilimanjaro
Una de las leyendas más vivas del Kilimanjaro es la que habla del leopardo del Kilimanjaro. Cuenta la leyenda que cerca de la cima apareció el esqueleto congelado de un leopardo, que nadie es capaz de explicar qué buscaba tan arriba. De hecho, algunos historiadores cuentan que no fue hasta los años 30 cuando se retiró el leopardo congelado, sustituyéndolo por una placa que reza “Leopard Point”.
La conquista del Kilimanjaro
Hasta el año 1889, y tras varios intentos previos, no se consiguió llegar a la cima del techo de África. Fueron el geógrafo Hans Meyer y el alpinista Ludwig Purtscheller quienes, junto con un guía local, Yohana Lauwo, alcanzaron el punto más alto de esta montaña y, por tanto, del continente africano.